2015/ Marzo/ Ambiente/ Por: OLPAGIBE
En los últimos tiempos los medios de comunicación a nivel nacional e internacional han mostrado los desastres naturales, el cambio climático, el calentamiento global y el desastre ambiental por las malas prácticas ambientales, esto gracias a las grandes industrias, minería, empresas, agricultura, etc., e indiscutiblemente la ignorancia sobre el cuidado del medio ambiente. De igual manera hay campanas, organizaciones, ONG, y personas del común que nos ensenan sobre la protección del mismo; hay que reconocer que esto nos abrió la mente y la necesidad de
preocupamos por el medio ambiente, aunque tarde pues la madre naturaleza, la
pacha mama, o como mejor deseemos llamarla, hoy nos pasa cuenta de cobro por
nuestro mal comportamiento.
Les quiero contar una inquietud que nace desde la
simplicidad de mis labores domésticas diarias y del deseo de contribuir con al
cuidado del medio ambiente.
Por lógica en nuestros hogares hay desechos los cuales
son entregados a la empresa de recolección de basuras, pero muchas amas de casa
o jóvenes interesados en reciclaje hacen la separación de los residuos. En mi
caso trato de no botar sobrados o restos de comida a la basura, trato de
cocinar justo lo necesario para no tener que botar comida (1,3 mil millones de
toneladas de comida se desperdician anualmente en el mundo y aun mueren niños
de hambre. En Colombia por ejemplo, en el departamento de la Guajira los niños
mueren de hambre o nuestros indígenas Embera Chami en las ciudades); cuando
tengo sobrados o residuos de comida, los empaco y los dejo en el andén de la casa
para que los habitantes de la calle los consuman y es grato decir que casi
nunca los encuentro a la mañana siguiente. Papel, plástico y vidrio los
empacamos en una bolsa aparte, las baterías inservibles las recogemos y se
llevan a los almacenes que las recolectan (La papelería 5 estrellas en Tuluá) el
aceite de cocina inservible lo embazo y lo dejo para la recolección de la
empresa de aseo para evitar la contaminación de las aguas, y los desechos no
aprovechables se van para la basura. Tal vez falle en alguna práctica, pero ya
inicie con mi responsabilidad como habitante de este planeta. Pero no puedo
negar mi frustración y enorme preocupación, pues estos residuos no son
aprovechados debidamente.
En Colombia existe reglamentación sobre el tratamiento
de los residuos sólidos y el protección del medio ambiente, tales como, La resolución
1045 DE 2003 "Por medio de la cual se adopta la metodología para la elaboración
de los Planes de Gestión Integral de Residuos Sólidos, PGIRS. Que deben adoptar
los municipios y distritos. El Gobierno actual recordó esta resolución con la
Propuesta de Metodología para la formulación, actualización, implementación y
seguimiento, de los mismos.
Esta metodología es el instrumento de planeación
municipal o regional que contiene un conjunto ordenado de objetivos, metas,
programas, proyectos, actividades y recursos definidos por uno o más entes
territoriales para el manejo de los residuos sólidos, basado en la política de gestión
integral de los mismos, el cual se ejecutara durante un periodo determinado.
En el municipio Tuluá el PGIRS (Plan de Gestión
Integral de Residuos Sólidos) está incluido en el plan de desarrollo en el
sector 15 medio ambiente, en el programa 33: Programa de Gestión Ambiental
Sostenible y Reducción del Impacto del Cambio Climático.
Podemos indicar que el PGIRS se cumple por partes:
1. La recolección y transporte de los residuos está en
nuestro municipio hace aproximadamente 19 años que en su momento fue una medida
antipopular y aunque nos duela cancelar el cobro no había otra salida ambientalmente
responsable.
2. La escombrera está en funcionamiento, ubicada en el
corregimiento de Aguaclara.
3. No tenemos botaderos a cielo abierto en nuestro
municipio que incumplan la ley o ponga la salud de los ciudadanos en peligro.
El manejo de los residuos sólidos puede ser un factor
determinante en el deterioro o beneficio de la calidad ambiental en un
municipio o ciudad, debido a las características de las actividades que
desarrollan los diferentes actores que las habitan. Los residuos, entendidos
como el conjunto de objetos materiales que una vez utilizados son rechazados
por quien los utilizo, son susceptibles de aprovechamiento en mayor o menor
grado según su naturaleza. La gestión de residuos involucra cuestiones
relacionadas con las políticas de uso del suelo, las normas ambientales, la garantía
de derechos fundamentales, las buenas prácticas de manufactura, los
encadenamientos productivos, entre otros. Una gestión integral de los residuos sólidos
que enfatice en su aprovechamiento puede generar para un territorio grandes beneficios
en materia económica, de sostenibilidad social y ambiental desde la perspectiva
del manejo de recursos.
Es por esto que indiscutiblemente existe la imperiosa
necesidad de proyectos sociales o políticas públicas para la recuperación y
aprovechamiento de los residuos, que involucren de forma seria y responsable, a
los recicladores de oficio para mejorar su calidad de vida, dándoles el trato
de ciudadanos en nuestra sociedad, dignificando su trabajo, mejorando su
calidad de vida con soluciones socioeconómicas y verdaderas prácticas de protección
del medio ambiente. Igualmente la zona rural requiere de estas políticas
urgentes, puesto que los campesinos pueden encontrar la oportunidad de ingresos
por medio de microempresas y la concientización de la protección de medio
ambiente recordando que la media y alta montaña no hay recolección de basuras y
gran parte de esta es arrojada a los campos, deteriorando los suelos y los ríos
y quebradas.
En nuestro País existe la política publica de inclusión
de recicladores de oficio en la cadena de reciclaje, la cual se está ejecutando
en una red de ciudades denominada “Como Vamos”, y que ya está dando buenos
frutos.
Esto quiere decir que el camino ya está hecho, que
existen las herramientas con las cuales se puede hacer cosas importantes como
mejorar la calidad de vida de un grupo considerable de personas, proteger el
medio ambiente, proyectos socioeconómicos, controlar y reubicar los depósitos
de reciclaje, generación de empleo. Es cuestión de tomar la decisión, de hacer
las alianzas público-privadas que se empoderen de esta política que sin duda
alguna podrida hacer cambio y ser ejemplo de ciudad. Los gobernantes deben
hacer estas cosas que aunque no deje ganancias económicas si generan
rentabilidad social y ambiental como un gran aporte a la construcción de
ciudad. Los ciudadanos debemos aprender a ver estas políticas o proyectos con
igual importancia como las obras de concreto.
TULUASEO está en mora para hacer campañas masivas a
gran escala, con seriedad y medición de impacto para el reciclaje, educación en
los colegios, los restaurantes, empresas, amas de casa, hogares, abrir la
puerta, cumplir con su responsabilidad y generar estrategias conjuntas con la Administración
Municipal, La SEDAMA que aunque si tiene algunos datos o censos de los
recicladores de oficio, también es hora de menos habla y más acción. Es claro
que si estos actores inician su tarea con una buena planificación, dedicación y
perseverancia los ciudadanos apoyaríamos esta propuesta y se haría un gran
trabajo en cultura ciudadana y protección del medio ambiente.
¿Las cartas están sobre la mesa, será voluntad política?
¿No habrá recursos? ¿Falta de gestión? ¿Amar nuestro corazón del Valle? No lo
sé, dejo esta reflexión para el tulueño que está agradecido y comprometido con
este terruño.
Colofón: Estos son temas que también le atañen y son
importantes a nuestros candidatos a la alcaldía.
FUENTES CONSULTADAS:
-El Tiempo.
-Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio, PLANES
DE GESTION INTEGRAL DE RESIDUOS SOLIDOS (PGIRS) Propuesta de Metodología para
la formulación, actualización, implementación y seguimiento - Proyecto de Resolución.
-Informe sobre la política publica de inclusión de recicladores
de oficio en la cadena de reciclaje
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