2014/ Enero/ EconoticiaS/ Edición 93/  Historia/ Por: Jaime Arenas Barón/

Los tulueños debemos reconocer que hemos cometido una gran equivocación al no recordarle a las nuevas generaciones los valores extraordinarios que han tenido seres nacidos en esta región y que con grandes muestras de conciencia social han hecho una inigualable labor a nivel local regional y nacional.

Tulueños recuerdan a José María Céspedes. Foto: EconoticiaS
De esos seres se destaca el sacerdote, medico, abogado, antropólogo, botánico y políglota Juan María Céspedes, quien estuvo involucrado en la gesta de nuestra independencia.

Recibió del Colegio San Bartolomé y la Universidad del Rosario la influencia que en estas instituciones ejercían José Celestino Mutis, verbo generador de la expedición botánica nuestra; éste, Mutis, a su vez quedó fascinado y comprometido con la independencia de estos suelos por las observaciones que hiciera el sabio Alejandro Humboldt, quien teniendo una claridad mediana sobre la necesidad de independizar estas tierras de los europeos, ya que estos por la búsqueda del oro y la minería hacían inmensos daños y devastaciones ecológicas, no podían estos hombres de ciencia aceptar esos impactos, de hecho agresivos al máximo con la madre naturaleza, dejando a su paso graves efectos en toda la condición de los recursos naturales y de la vegetación, impactos que todavía continúan porque se hizo aceptable lo inaceptable.

Cuando don Antonio Nariño inició la campaña del sur que estaba inspirada en la independencia para la conservación de la naturaleza, nuestro querido coterráneo Juan María Céspedes no dudó un instante en involucrarse con las tropas liberarías como capellán de los ejércitos comandados por José María Cabal. La conciencia que tenían estos próceres independentistas era muy clara: defender al máximo el más grande de nuestros tesoros que no eran precisamente los minerales sino las plantas que ofrecían tantas posibilidades para la medicina, la industria, para el comercio y que por su misma razón se podían erigir en un gran imperio, así como lo habían diseñado nuestros antepasados los incas, quienes fueron llenos de conocimiento, sabiduría, astronomía, y que cultivaron y domesticaron el maíz, que conocían plenamente la influencia de la luna, de los astros en la constitución del universo por los amplios conocimientos de astrología.

Con sobradas razones los miembros directivos de la Institución La Graciela, los padres de familia y los estudiantes optaron honrar la memoria de este insigne hombre, cambiando el nombre de la Institución Educativa por Institución Educativa Juan María Céspedes.

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*Jaime Arenas es el Director Científico de la Asociación Naturista Juan María Céspedes. 

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