2014/
Junio/ EconoticiaS/ Edición
95/ Organización campesina/
La
cancha de micro, que desde hace tiempo era solo un sueño para las familias de
la comunidad de la vereda San Antonio en Jurisdicción del corregimiento de
Monteloro, municipio de Tuluá, gracias a este mecanismo de participación
comunitaria hoy es una realidad.
Esta
comunidad ejemplo regional de integración vecinal y comunitaria, la misma que
gracias al trabajo mancomunado de su junta comunal con cada uno de los miembros
de su comunidad, su gestión ante la empresa privada y los organismos
gubernamentales, cuentan con escuela propia dotada de todo lo necesario para
educar a sus hijos.
¿Qué significa La
Minga?
La
minga (minka en quechua) es una antigua tradición de trabajo comunitario o
colectivo con fines de utilidad social. Ciertamente el significado de la minga
se deriva del conocimiento que tenían los aborígenes de que realizando un trabajo compartido para
el bien común, se lo hace más rápido y mejor.
La importancia
de la minga
radica en el
valor actitudinal del evento, ya que ante la convocatoria de los
líderes, la gran mayoría de la población acudía al llamado, se movilizaba, y
organizaba de tal manera, que el esfuerzo físico que la minga representaba, se
convertía en una verdadera celebración de vida, de amor, en una auténtica
fiesta. Es de resaltar los sentimientos y valores que se relacionan con la
organización y ejecución de la Minga:
Liderazgo: porque el llamado
ante la necesidad de ejecutar una “minga”, lo realizaba el referente ante el
pueblo.
Solidaridad: porque la gente
acudía minga por el sentimiento de ayudar a los demás, pensando que
interviniendo en la misma, se estaba favoreciendo así mismo, por el bien común
que ella representaba.
Compañerismo: porque ante las
dificultades que generaba el esfuerzo de realizar una tarea asignada a un
individuo en un tiempo determinado sin poder alcanzar el resultado esperado, el
resto de personas acudían a él, para compartir el esfuerzo y culminar a tiempo
el trabajo.
Trabajo en equipo: porque destierra el
individualismo, ya que cuando se trataba de obras gigantescas, como
generalmente eran las que se planificaban con mingas, una sola persona no las
podían ejecutar, pero, trabajando en equipo, se las realizaba con enorme gusto
y el esfuerzo adecuado.
El hecho de compartir: porque como estos
eventos tenían una duración generalmente de un día o más de esfuerzo sostenido,
debían llevar los alimentos familiares a la minga, y al momento indicado,
ponerlos al servicio de los demás, organizando una mesa común para todos.
Sentido de
colaboración:
porque si los líderes organizaban comisiones de trabajo en diferentes frentes,
ya sea brindando la dirección técnica del trabajo, “repartiendo” algún refresco
para mitigar la sed, los mingueros cumplían sus obligaciones con vehemencia y
buena voluntad.
Satisfacción por el
bien común:
porque la obra realizada a través de la minga, favorecía a todos, ya que se
transformaban en beneficiarios de estas obras, que levantaba indudablemente la
calidad de vida de los habitantes.
Elevada autoestima: porque un trabajo
bien realizado, hecho con alegría y con resultados positivos para los usuarios,
eleva la condición de querernos a nosotros mismos y al resto de congéneres.
Amor al terruño: porque al entregar
el esfuerzo en una minga, se está manifestando el cariño por la tierra, a quien
se la ha engrandecido con un pequeño esfuerzo que sumado al de los demás, se
transforma en una hermosa realidad de progreso.
La
Junta Directiva de la Junta de Acción Comunal de la Vereda San Antonio, está
integrada por Humberto Gallego Alzate, Presidente, Carlos Sánchez, Tesorero,
Carlos Herrera Vicepresidente, Isbelia Peña, Secretaria y Oscar Jurado, Fiscal,
quienes junto a la comunidad y gracias a la minga, hicieron esta obra realidad.
Gracias
al acompañamiento de su junta directiva y la importantísima labor de gestión y
liderazgo ejercidos por don Humberto Gallego Álzate, el presidente de esta
junta comunal, hoy una de las jóvenes en lo que tiene que ver con la
consecución de su personería jurídica, es ejemplo a nivel regional y nacional
por su progreso y desarrollo, pero muy especialmente por su gran capacidad de
organización comunitaria para sacar adelante su región e inclusive apoyar
veredas y corregimientos vecinos.
Un
trabajo comunitario que sumado a esa gran labor de gestión de don Humberto
Gallego, que con su estilo y a su manera original y particular ha llegado a
todas las instancias solicitando apoyo no para él como lo hacen hoy muchos de
los mal llamados líderes, sino para su comunidad, para su gente, desde cuadernos
y útiles para los niños de la escuela, uniformes, balones y hasta comida para
preparar los desayunos cuando aún los del gobierno no han llegado. Su titánica
y desinteresada labor ha permitido gestionar ante el gobierno municipal el mantenimiento permanente de las
vías, la construcción de cerca de 10 obras de arte en su vereda, jornadas del
SISBEN, de salud, la realización de festivales y fiestas de la madre como
actividades culturales y recreativas.
La
minga como fue bautizada esta cancha múltiple es el producto de la unión de
voluntades y esfuerzos de la comunidad de San Antonio y del gobierno del
ingeniero José Germán Gómez, pues los primeros tomaron la iniciativa y
aportaron la mano de obra y parte del material de río y el alcalde y su equipo de
gobierno aportaron maquinaria, cemento y porterías para la misma. Se destaca
igualmente el apoyo brindado a esta comunidad por algunos amigos y vecinos de
la vereda tanto para la construcción de la cancha como para la realización de
su inauguración con fiesta de la madre y boda campesina incluida.
Una
vez más queda demostrado que la unión hace la fuerza y que el trabajo comunitario
en unión del apoyo y la voluntad política del gobierno si pueden generar HECHOS
PARA EL BIENESTAR.
Durante
el acto inaugural de la cancha múltiple de la vereda San Antonio, se cumplió
también con una hermosa Boda Campesina, que se constituyó en otro
acontecimiento.
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